2001 – “Mi hija celíaca! Miedo a lo desconocido”.

11 de septiembre de 2001, sentí que se me derrumbaba el mundo. Ese día a mi pequeña de 14 meses le diagnosticaron la enfermedad celíaca. Transcurrieron 20 años de ese momento lleno de temor y de incertidumbre, de miedos y preguntas que solo el tiempo me respondería.

2002 – “Enfrenté los temores, poniendo las manos en la masa, sin gluten”.

Con el apoyo y asesoramiento adecuado, entendí que siendo celíaco se puede lograr llevar una vida totalmente saludable si no se consume esta proteína. Pero esto que si bien parecía algo tan simple, no lo fue. Descubrí que en el mercado el gluten se encuentra en muchos productos procesados. Y fuera de casa, en ese entonces no eran muchas las opciones para alimentar a mi hija con seguridad.

2008 – “Mi cocina, mi pequeño laboratorio”.

Allí comienza mi aventura, teniendo el privilegio de poder acompañar desde mi hogar el crecimiento de mis 4 hijos, me dediqué a transformar mi cocina en un pequeño laboratorio.
Todo lo que los hermanos de Sofi pudieran comer (pan, alfajores, tortas, pizzas, churros, milanesas) con gluten, yo encontraba la forma de cocinarlo, versión sin gluten.

2011 – “Como mi hija, muchos más”.

En 2011 comienzan los primeros borradores de mi emprendimiento. Ese sentimiento difícil de transmitir, una mezcla de bronca, injusticia, impotencia, que se me genera cuando mi hija, como tantos otros, tienen que salir de casa y No Encuentran Nada Para Comer, o verse aclarándole al cocinero de algún restaurante que no es una manía, sino que lo de uno, es delicado. Todos estos sentimientos, se transforman en la fuerza motora de un proyecto que va más allá de mi pequeño mundo para llegarle a más personas con esta dificultad para encontrar alimentos ldg.

2017 – “Nace Cocina Sabini”.

Luego de tantos años de gestación, le pongo nombre y cara a mi pequeño emprendimiento.
Comencé abriendo las puertas de mi casa ubicada en Atlántida, varios años elaborando variedad de productos, en diferentes formatos, que se iban moldeando según las necesidades y situación del entorno económico-social. Durante esos años los clientes podían venir a buscar sus churros, sus milanesas pastas, pizzas y más.

2020 – “Pasaron ya casi 20 años desde que comenzó esta gran aventura sin gluten”.

Donde todas las experiencias vividas, todos los ensayos, con aciertos y errores han sido parte de un hermoso proceso. Quiero agradecer a todas las personas que encontré y sigo encontrando en este intenso camino de crecimiento personal y profesional. Gracias a todos las Familias y clientes que confían en mi. Gracias a mis hijos por elegirme y enseñarme❤